domingo, 18 de julio de 2010

Esencialmente hablando...

Te levantas a la mañana, que haces?, quizás vayas a la facultad o quizás al laburo o lleves los chicos al colegio, o a correr o al templo a rezar.

Quizás te levantes de una cama linda en una linda habitación, quizás te levantes de una cama pobre en una pobre casa.

Quizás te levantes y a tu lado esté la persona que amás, o quizás la que odias o la que te es indiferente, o sólo, y quizás sólo por fin, o todavía sólo o sólo otra vez.

Quizás te levantes con entusiasmo por todo lo que hay para hacer o para disfrutar, quizás te levantes y no sepas que hacer, o quizás lamentes otro día más…

Quizás dentro de unos años te levantes y ya seas profesional y tengas un laburo, o quizás antes te levantabas a laburar y ahora te levantes a buscar laburo, quizás la cama rica pasó a ser pobre, o la pobre a rica.

Quizás dentro de unos años los chicos que llevabas al colegio estén llevando a tus nietos, quizás la cama compartida pasó a ser completamente tuya, alegremente tuya o tristemente tuya.

Quizás ahora cuando te levantes peines tu pelo blanco, aquel que era oscuro, quizás necesites anteojos para ver la hora o ciertos dolorcitos hagan que te tengas que levantar despacio.

Y seguramente algún día te despertarás y quizás una enfermera esté a tu lado, o tus seres queridos llorando o disimulando, o no te levantes más.

Lo curioso es que siempre sos vos, sos el que se levanta para ir a la facu, al laburo, en una cama pobre o rica, quien se levanta joven o viejo, quien ya no se puede levantar, quien se ha dormido para siempre, siempre sos vos, pero…quien sos?

sábado, 10 de julio de 2010

Mucho autoayuda, autoestima, autoetc… y que pasa con la autohonestidad?

Te cuento una cita de John Kenneth Galbraith, uno de los más destacados e influyentes economistas del siglo XX, que dice mas o menos así: “La sabiduría convencional hace que adhiramos a todas aquellas ideas que nos sean cómodas, confortables, contribuyan a nuestro bienestar y autoestima, aunque poco y nada tengan que ver con la realidad o con la verdad”.

Por otro lado o por el mismo lado, leyendo el libro “¿Que les pasó?” de Ernesto Tenembaum, quien cuenta que a los pocos meses de haber asumido a la presidencia, Kirchner lo mandó a llamar para pedirle explicaciones por una crítica muy dura que el autor había publicado. Cabe aclarar que el periodista había votado a Kirchner y en ese momento era simpatizante del gobierno.

Kirchner muy enojado le dijo que lo que hizo iba en contra de la única oportunidad que tenía el progresismo para cambiar la Argentina, y lo invitaba a sumarse a la causa desde su profesión de periodista.

Tenembaum se disculpó, y dijo esto que me dejó pensando: “que él es un cronista y como tal debe reflejar a su público la verdad, independientemente, aún, de su propia ideología, simpatía, creencia o conveniencia”.

Te pregunto, ¿como tu cronista interno te está contando la realidad, esa crónica en base a la cual tomás tus decisiones, te relacionas con los otros y con vos mismo?, ¿es un cronista independiente apegado a la verdad o está manejado por los intereses espurios de tu poder político?.

Por mi parte me tengo que ir, tengo una reunión urgente con mi gente de prensa…